Respetar al prójimo
La fundación más importante en una vida de Torá es honrar y respetar al Creador del universo. Cuando tú cumples con Sus mandamientos, estás demostrando, activamente, honor por Él. Es por eso que el judaísmo considera que humillar a otra persona es uno de los crímenes más serios. Cuando tú avergüenzas a alguien, estás haciendo mucho más que sólo causar dolor. Tú estás atacando su dignidad. Reconocer la dignidad del ser humano es parte del honor y respeto que uno le debe al Todopoderoso.
Cuando entiendes esto correctamente, todos tus encuentros estarán basados en este respeto interno. Tratarás a todo ser humano con el respeto de la realeza. Como dijo Ben Asai en el Talmud (Ierushalmi Nedarim 9:4): "'Cuando D'os creó al hombre, Él lo creó a Su imagen’ (Génesis 5:1) es el principio más importante de la Torá".
Hoy mismo, toma la determinación de que si alguna vez ves a alguien humillando a otra persona, tú intervendrás. Tú puedes decir: "esta persona es especial. Por favor, sé cuidadoso con su dignidad".
Ver Rabí Ierujam Levovitz - Daat Jojmá Umusar vol 2, pag. 34-5